Se escapa el sol, se escapa,
sale del escondite preparado
entre cortinas de sangre muy salada
y las gotas del mar embravecido.
Se escapa, para mirarse en el espejo
de su amigo, Cantábrico, encendido
con aires de rabia concentrada
doblando la espuma y a la escarcha
dejándola fuera, entre las jarcias.
Asoma, el sol, su cara enrojecida
la muestra entre nubes asombrado
en franca batalla que derrota
a la intemperie que le da la mano.
Luego, se juntan, el sol y la bravía
mar, que se encrespa y adelanta,
contemplando entre susurros el paisaje
que forman, ambos, el sol y la marea
que, lenta, entre bancales, va bajando
como si el cuerpo se desangrara
entre la urdimbre de musgos y de breas.
#MariaToca
Santander-3-2-2017. 20,38
