Esculpiré con cincel
la memoria acristalada de estos tiempos,
crecerá en la mente, sin resuello,
unas formas de amor inacabadas.
Como caballos desbocados
cabalgan los sentidos
en pos de una razón o una disculpa
que me impida cruzar al otro lado.
Con pinceles de sangre
decoré la vida atrapada
en cárceles de amor,
o sitiadas de olvido.
Tal como supe, como quise o dejaron
labré la tierra cercada de pecado
y fue, al cabo, carne inacabada,
tan solo sentimiento.
Batida por tormentas
acuciada de amores subalternos
y olvidada por muchos,
tan siquiera, fui un aire
que sopló, poco más que un momento,
dejando como huella,
versos, borrados por el viento.
Triste o vacua misión
que se fraguó en brazos del olvido.
Santander-1-5-2016. 12,27.