Cuando te hiciste aire.

 

A veces se me olvida que entraron los furtivos

en mi pecho, y robaron mi alma;

se me olvida que quedó un hueco infame

en donde antes hubo, un corazón alado.

Se me olvida el dolor, las lágrimas, el hambre

de abrazos olvidados

y como si no quisiera, sonrío con mesura.

Incluso, a veces, lo confieso, puedo reír y río

como una leve y  sutil explosión de alegría

-me crecieran las alas-

y de nuevo, con cautela,  sin prisa,

 me apresto a volar siempre a ras de tierra.

En ratos, se me olvida el dolor

y me crece, de forma solapada,

una incierta alegría;

quizá pudiera ser, recompensa y soldada

de los tiempos aciagos

en que apenas vivía.

Lo que no se me olvida,

jamás, aunque quisiera,

es la  sonrisa abierta, y tus ojos,

cuando aún te tenía.

Eso, nunca, me oyes,

nunca se me olvida

porque crece conmigo

en el hueco punzante

que dejó el corazón,

cuando te hiciste aire.

María Toca Cañedo©

Santander-02-03-2023. 10,30

Acerca de Maria

Escritora María Toca: 1ºPremio Ateneo de Onda Novela, 2016: Son Celosos los Dioses 2ºPremio de Relato Ateneo de Fraga: El Paseador, 2014 Finalista Premio Internacional de Relato Hemingway, 2013 Finalista de varios premios más de relato. Poeta Articulista/Coordinadora/ Fundadora de LA PAJARERA MAGAZINE. Obra publicada: Novela: El Viaje a los Cien Universos Son Celosos los Dioses Relatos coral: Vidas que Cuentan Desmemoriados. Poesía: Contingencias
Esta entrada fue publicada en poema y etiquetada , , , , , . Guarda el enlace permanente.