Que si te quise, me preguntas,
que si te quiero, o te querré,
mas tu pregunta lleva miedo
entre los dientes y el corsé
que oprime y ahoga
al dejar el paso atrás.
Por esas silabas, desfila
con parsimonia una premisa
que apenas yo, puedo entender.
Cuando te quise, no estabas,
al olvidarte, quedó atrás
lo que pené en unos tiempos
durante los cuales, te añoré.
Así que hoy no me preguntes
ni tan siquiera mires más
porque ni sé porque te quise
ni cuando y como te olvidé.
Aire, te doy y puerta abierta,
al marchar mira hacia atrás,
aquí, me quedo tan tranquila,
mientras, cabizbajo, tú te vas.
Santander-30-6-2016. 17,17.