Un poeta de casa dijo que el poema se escribe,
solo, llegando cuando quiere
que no lo redacta la mano amanuense;
pues ,solo, brota y toma vida, apenas utiliza
a quien traduce la dulce emoción
en letra impresa.
Un poeta de casa. Hoy nacía,
relumbrón de poemas que parieron
su mano, traduciendo la lírica
en ramillete de versos encendidos
y sonetos perfectos donde brilla
la solemnidad y la desidia
de quien vivía a sorbos esta vida
labrando inmortalidad a golpes de poesía.
-José o Pepe, en confianza, llamaron al muchacho,
Hierro, por apellido-
Nació en tierra verde y en desfalco
pasó parte de su vida
repartiendo amores por la estepa
volviendo la mirada a sus verdes
a cuyo remanso, tornaba la mirada algunos días.
Ni barrotes, ni censuras le callaron,
al contrario, que labró con ellas églogas sangrantes,
a veces, muy hermosas
y pasó a la historia como hombre largo en amigos
y bueno donde hubiera.
María Toca Cañedo©
Santander-21-12-2022. 17,05
In memoria José Hierro, en su cien aniversario.