La patria es ese olor a tierra húmeda de rocío mañanero,
el sol que se cuela entre el visillo
y me despierta,
el vuelo de gaviota, libre
cuando busca comida o me saluda ,
las olas que me cubren
y el rumor de un Cantábrico enfadado.
También son las planicies de Castilla,
las olas que forman los olivos andaluces
el rumor dulce de las rías
y el abrupto despeñadero de costa catalana.
El Turia y su sonrisa, el Ebro serio de Aragón mientras lo riega.
El Tajo, el Guadiana y esa brecha de belleza que es Sevilla.
La patria, la pequeña, son amigos,
los hijos que parí y otros que acojo.
La patria es la gente , la patria es un paisaje,
un minuto de paz, amigable dulce que descubres.
Nunca será discordia, armas, bandera que colonice o que apriete a otros, con gritos de patriota.
La patria no es milico embravado
que pisa con su bota al vecino.
La patria somos las parias, las nadies, las que somos. Esa y no otra, es mi patria.
María Toca.