Habana (microrrelato)

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No sabría definir a Habana. No era guapa, tampoco fea. Tenía una sonrisa irregular,  que torcía su rostro, cuando la esbozaba. Asomaba por sus labios unos dientes conejiles, mientras los ojos, de color indefinido y cambiante, sonreían con astucia. El pelo  colgaba apaisado, enmarcando pobremente el rostro, como lamido por lenguas montaraces. Nada destacaba en Habana, se dijo Mario, con parsimonia. El embrujo surgía, cuando empuñaba su voz, bronca, nacida de la caverna de su pecho, y desgranaba historias. Entonces Mario podía cruzar el umbral del infierno, acercarse a un cielo tenebroso, enzarzarse en tibios sueños afantasmados, o por el contrario, vibrar como cuerda de violín, con la liviana historia de cuentos infantiles. Al poco, desaparecía el decorado lúgubre de la habitación, con el sucio telón de las cortinas que difuminaba la luz, hasta extinguirla, la colcha rasposa de un color, que en tiempo, fue coral. Las paredes se iluminaban con el estrepito de las palabras salidas de una garganta milagrosa. Mario, entraba de la mano de Habana en un mundo irreal. El único deseado. Donde se arremolinaba el tiempo que pagaba, hasta hacer inexpugnable los minutos pasados entre los brazos de una puta que no era ni fea ni guapa, pero que contaba historias como nadie.

Acerca de Maria

Escritora María Toca: 1ºPremio Ateneo de Onda Novela, 2016: Son Celosos los Dioses 2ºPremio de Relato Ateneo de Fraga: El Paseador, 2014 Finalista Premio Internacional de Relato Hemingway, 2013 Finalista de varios premios más de relato. Poeta Articulista/Coordinadora/ Fundadora de LA PAJARERA MAGAZINE. Obra publicada: Novela: El Viaje a los Cien Universos Son Celosos los Dioses Relatos coral: Vidas que Cuentan Desmemoriados. Poesía: Contingencias
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