voltea la solana, se asoma
y huye, corriendo por la vereda estrecha
que rodea con sus brazos a la casa.
Salta, brinca, baila y se enzarza
con mariposas, jilgueros y la escarcha
tejiendo sombras por las ramas.
La llamó, le grito asomada a la ventana
mas ella ni voltea la cabeza.
Viaja, trastea por las nubes y se apaña
en algún pajar o en una braña.
Libre y serena, luego, regresa,
alicaída y pastueña
y vuelve a asentarse en mi cabeza
para que yo la transforme en palabras.
- María TOCA
- Santander-08-12-2022. 9,14