Se está bien arrullada por el canto de cigarras,
bañada por la difusa luz que llega de esa luna,
que, solapadamente, asoma a mi ventana.
Se está bien, en silencio,
con el canto solaz de la palabra,
que arrulla, como puede, mi morada,
en soledad, amplia, cantada,
asomada a la plaza, que enciende luces
para mostrar, el amplio espectro de las nubes.
Sola, en compañía de palabras,
voces, diversas, que cuentan las historias
que luego trasmito en estos versos,
o en cuentos, novelas o arrebatos.
Palabras susurradas al oído,
desde el silencio mechado,
de unos sueños.
Se está bien, aquí, en mi morada,
en mi nido, que me ampara y me cuida,
me da calma, apacigua mis tormentas
y cuando me siento sola, me acompaña.
Se está bien, aquí, callada.
Santander- 25-7-15. 22,35. 551 días sin ti pero contigo.