Buscar una palabra.

Hoy he leído en cualquier parte

que tenemos que emprender una tarea;

buscar palabra que defina

la rabia, el revoleo,

 el nudo que se forma en la garganta

cuando  la mano asesina nos las matan.

Cuando el grito sentido se hace agua,

cuando la garganta se seca por la rabia

y se nos forman nudos de hojas secas en el alma.

Que hay que buscar una palabra…

dice una mujer desesperada.

Y yo, que en eso de amar lenguajes,

verbos, conjunciones, hablas, y lenguajes

me  alborozo cual  pececillo nadando  en el estanque,

 me pongo a pensar, taciturna a mas de  espesa, esta mañana.

¿Qué decir cuando  la voz se torna grito silencioso?

¿cómo expreso el dolor agudizado por el viento

que,  se lleva los nombres, las citas, las esperas,

de tantas como fueron masacradas

por algo que unos niegan

y otros -acalorados y promiscuos- se aprovechan?

¿Qué palabra, qué expresión, qué vocablo

nos define a tanta vida quebrada y al dolor

de comprobar que poco importa?

¿Qué rutina seguiremos ante el miedo,

o la malsana forma de sentir de tanta gente

cuando a la hermana se le quiebra la garganta

lanzando  un lamento, a los que casi siempre

turba el  silencio  y muy consciente

que a ésta -la última-

le seguirán otras muy pronto?

Déjenme que les diga que no siento

que haya voces que nos tornen a la mente

y puedan explicar lo inexplicable

el por qué una mujer ha de morir

tan solo por el simple hecho de estar,

de ser, de caminar lento, con cuidado

en eso que tantos llamaron libertad.

Les prometo buscar, inquirir con la premura

que el hecho demanda, por incierto,

algún vocablo que nos defina el dolor,

la rabia, la impotencia, el desacato,

que a cada una de las hermanas nos produce

cuando cae otra y otra y otra más,

bajo mano de criminal exacerbado

por esta sociedad que se resigna

a la muerte, a la complicidad un tanto impune

de una mujer que, a cada poco,

 la masacran, por el único delito de levantarse

y caminar con paso firme hacia un sendereo

que cualquiera ha tenido a bien

pisar primero .

Es difícil, os lo juro, es bien complejo

definir este sentimiento que nos aprieta,

y darle nombre. Complicado

explicar con la palabra, el desacato

con la propia humanidad, de ser mujer

y por el hecho de serlo, eliminada.

María Toca Cañedo©.

Santander 06-09-2024. 12,02.

Acerca de Maria

Escritora María Toca: 1ºPremio Ateneo de Onda Novela, 2016: Son Celosos los Dioses 2ºPremio de Relato Ateneo de Fraga: El Paseador, 2014 Finalista Premio Internacional de Relato Hemingway, 2013 Finalista de varios premios más de relato. Poeta Articulista/Coordinadora/ Fundadora de LA PAJARERA MAGAZINE. Obra publicada: Novela: El Viaje a los Cien Universos Son Celosos los Dioses Relatos coral: Vidas que Cuentan Desmemoriados. Poesía: Contingencias
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