9 meses de ausencia

Acaba el reloj de cruzar el umbral

de un día más,

y con velo turbio, se pasa el tiempo

en que te marchaste

dejando la puerta abierta de la soledad.

Son ya nueve meses,

pasaron sin tino, apenas sin irse

de nuestro recuerdo, tu sonrisa bella,

la voz dulce, calma, cuando nos decías:

por qué no mamá, porque no ayudar,

si alguien lo pide. Por qué no estar

si se necesita. Si no cuesta nada,

si se puede, se hace.

Ese era tu lema, por eso ahora,

lo recuerdo tanto, entre el velo

de un telón de profunda pena

porque ya no estás,

porque no te veo…

mas siento tu ausencia

tu mano en mi pelo, tu lánguida esencia,

por eso, aunque te  marchaste

dejaste la vida, el aliento tácito,

de tu pertenencía.

Nos queda la fuerza,

nos queda el recuerdo

y tu fantasía, entre mi memoria.

Me alienta tu alma,

me acompaña la sutil presencia

de tu compañía, aunque tú no estás,

me queda la dicha, de haberte tenido.

Santander-19-10-14, 00,07. 9 meses sin ti pero contigo.